Deu 28:10 Y todos los pueblos de la tierra verán que el nombre de YHVH es invocado sobre ti, y tendrán temor de ti (BTx 3)
Y verán todos los pueblos de la tierra que el nombre de Jehová es invocado sobre ti, y te temerán. Deuteronomio 28:10
Siendo esto así no hay razón para temer.
De lo contrario, demostraríamos un espíritu mezquino y daríamos una prueba más bien de incredulidad que de fe. Dios puede hacernos tan semejantes a Él, que los hombres se vean obligados a reconocer que con sobrada razón llevamos su nombre y que realmente pertenecemos a YHVH. ¡Quiera el Señor que obtengamos esta gracia que Él quiere darnos!
Los impíos temen a los verdaderos santos.
Les aborrecen, es cierto, pero les temen. Amán tembló delante de Mardoqueo, aun cuando buscaba la destrucción de aquel hombre bueno. De hecho, su odio proviene muchas veces del temor que su excesivo orgullo les impide confesar. Prosigamos sin temor el camino de la verdad y de la rectitud. El temor no debe dominarnos a nosotros, sino a aquellos que obran mal y pelean contra el Señor de los ejércitos. Si en verdad es invocado el nombre del Señor sobre nosotros, podremos estar seguros, como en otros tiempos lo estaba el romano con sólo decir soy romano, y podía reclamar la protección de las legiones de aquel vasto Imperio. Del mismo modo todo aquel que es hijo de Dios, puede contar con la omnipotencia de Dios, el cual antes se quedaría sin ángeles en el cielo que dejar a un hijo suyo desamparado.
Sé tú tan valiente como un león en defensa del derecho, porque Dios está contigo.
La Chequera del Banco de la Fe.
Traducción de Allan Román

No hay comentarios:
Publicar un comentario